Hace ya tiempo que como pescador deportivo siento algo especial por el spinning. Ya no lo vivo como un deporte, es más como una pasion o como una forma de vida. En cualquier momento y en cualquier lugar, siempre que las condiciones lo permitan y a veces ni eso, siento la necesidad de mojar mis señuelos en agua salada.
Quien conoce mi pasion, entiende mi locura.
Estos últimos días sentía la necesidad de probar un señuelo con nombre propio: El Toro 110XH, al que con especial cariño lo bautizamos como "El Torito".
La verdad es que me parece que la persona que lo creó pensaba en lo mismo que yo. Un señuelo reforzado, con alma completa de acero, un tamaño y un peso que permiten lanzarlo al infinito y que podemos mover en distintas capas de agua.
Este señuelo tiene una peculiaridad: su natación un tanto extraña. No es el pez más bonito nadando, pero su efectividad no le viene de aquí. Cuando le damos tirones largos y continuados crea unas turbulencias en el agua muy poco estéticas pero súper efectivas. No hay un solo depredador marino que le haga ascos.
En cuanto al equipo que utilizo: como titulares, sin despreciar a otros fijos en mi barco, la Bloody Hartcore S2 Evo y el Nº 3 4000. Es un equipo perfectamente equilibrado y con una gran reserva de potencia para este tipo de pesca tan exigente. Trenzado Power MASARU del 0,16 y a pescar!
Yo sigo lanzando!
Jose Pablo Trenado // HART Fishing Team